Planee las comidas con sus niños
Lorrie Coop, Servicio de Extensión de Texas A&M AgriLife
En el acelerado mundo actual, la planificación de las comidas no es sólo una tendencia sino una estrategia crucial para garantizar que los niños crezcan sanos y bien nutridos. Los estudios muestran de manera repetida que los niños que participan en la planificación de las comidas con sus familias tienden a tener mejores hábitos alimentarios y una mejor salud en general.
La planificación de las comidas no implica sólo el decidir qué comer, sino también educar a los niños sobre la nutrición, el tamaño de las porciones y la importancia de las comidas balanceadas. Este proceso fomenta un sentido de responsabilidad y empoderamiento en los niños, ayudándolos a tomar decisiones informadas sobre lo que comen. También reduce la probabilidad de depender de comidas preparadas congeladas o de comidas rápidas no saludables, que pueden contribuir a la obesidad y otros problemas de salud.
Además, involucrar a los niños en la planificación de las comidas fomenta los vínculos y la comunicación familiar. De igual manera, brinda una oportunidad para que los padres enseñen habilidades culinarias, compartan tradiciones alimentarias culturales o familiares y discutan la importancia de los ingredientes frescos. Los niños que ayudan a planificar las comidas tienen más probabilidades de probar nuevos alimentos y desarrollar un paladar más amplio, lo cual es esencial para su salud y bienestar a largo plazo.
Desde un punto de vista práctico la planificación de las comidas también puede ahorrar tiempo y dinero. Al preparar las comidas con anticipación e involucrar a los niños en tareas como hacer la compra y preparar las comidas, las familias pueden optimizar sus rutinas y reducir el desperdicio de alimentos.
En general, la planificación de las comidas no sólo se trata de lo que hay en el plato sino de fomentar hábitos saludables, promover la unidad familiar y capacitar a los niños para que elijan alimentos de manera inteligente a lo largo de sus vidas. Al hacer de la planificación de las comidas una parte habitual de la vida familiar, los padres pueden preparar a sus hijos para una vida de buena salud y bienestar.
Las garrapatas y el síndrome de alfa-gal
Diana Romano, Servicio de Extensión de Oklahoma
Las personas que han sido picadas por una garrapata, especialmente la “garrapata con estrella solitaria” (lone star), pueden desarrollar el síndrome de alfa-gal (AGS por sus siglas en inglés). El síndrome de alfa-gal, también conocido como alergia alfa-gal o alergia al azúcar que se encuentra en todos los mamíferos y otros primates excepto en los humanos. La afección resulta de una exposición pasada a ciertas picaduras de garrapatas. La mayoría de los casos en los Estados Unidos ocurren en los estados del sur, del este y centro, donde se encuentra comúnmente esta garrapata.
Productos alimenticios y no alimenticios que contienen el azúcar alfa-gal:
- Mamíferos como vacas, cerdos y ovejas.
- Cualquier producto alimenticio de estos animales, incluyendo leche, queso, yogur. Hay muchos productos más, entonces es muy importante leer las etiquetas de los alimentos.
- Cualquier otro producto elaborado a partir de estos animales, como ciertos medicamentos, cosméticos y dispositivos médicos.
Síntomas
Los síntomas pueden aparecer entre 2 y 4 horas después de la exposición a alfa-gal. En la actualidad no existe una cura disponible. Una vez que la persona desarrolla la alergia, la mejor vía en la prevención de los síntomas es evitar los alimentos y productos mencionados anteriormente al igual que tener mucho cuidado con los medicamentos y cosméticos que utiliza. La única manera de saber si alguien tiene esta alergia es haciendo una prueba de laboratorio.
- Los síntomas pueden ser leves, como una erupción en la piel o malestar gastrointestinal. En este caso, el médico puede recetar antihistamínicos y otros tratamientos.
- Los síntomas pueden ser graves, como el choque anafiláctico. Esta es una situación de vida o muerte, es necesario llamar al 911 y acudir a la sala de emergencias.
Cómo prevenir una picadura de garrapata
Antes de exponerse al campo abierto o al aire libre:
- Evite las áreas cubiertas de hierba, maleza y bosques donde se puedan encontrar garrapatas.
- Camine por el centro de los senderos.
- Use repelente para insectos.
- Si camina donde hay maleza, cubra su ropa y zapatos con “permetrina”.
Una vez en casa busque las garrapatas:
- Revise su ropa y zapatos
- Examine las mascotas
- Mientras se ducha
- Si ve una garrapata adherida a su piel, quítela inmediatamente.
Referencias: CDC – Alpha-gal síndrome Foto: CDC